El objetivo de Frette, durante toda su historia, ha sido fabricar ropa de cama de calidad superior. Solo utiliza los hilos más finos y los artesanos más capaces para crear productos que incorporen lujo, comodidad y creatividad, siendo Frette muy reconocida por sus elegantes diseños y sus acabados refinados.
Durante más de 150 años, los productos Frette han adornado el altar de la Basílica de San Pedro, el vagón comedor Orient Express, los hoteles más lujos y más de 500 dinastías reales europeas han dormido en una cama Frette.